Charbel Makhlouf

Mónaco y San Libanés

El eremita que vivió de la contemplación

Este humildísimo eremita ha vivido en la ocultación absoluta, en la oración, en la meditación y en la penitencia.
La radicalidad de su camino en el discipulado de Cristo lo enumera entre las estrellas más luminosas y ha conseguido reflejar la luz celestial en su vida, como un faro que iluma el pozo espiritual de este tiempo.

Frecuentó la escuela aprendiendo a leer con los salmos y los textos litúrgicos en sirio. A los 14 años ya se retiraba a rezar en una cueva fuera del país, hoy llamada "la cueva del santo". Nadie como él ha actuado tan sorprendentemente e incisivamente.

Biografía

Youseff Makhluf nació el 8 de Mayo de 1828 en el pueblo de Bqaakafra, a 1800 metros de altura sobre el valle santo del distrito de Basharre septentrional del Líbano. Fue el tercer hijo de una familia de campesinos. Fue precedido por sus hermanos Hanna y Bechara, y por sus hermanas Kaoun y Warde.

En 1831 quedó huérfano de padre y estuvo sometido a la tutela de Tannous, su tío paterno. A los 14 años se retiró a una gruta a las afueras del pueblo para orar por horas (hoy es conocida como "la gruta del santo".
A los 22 años, a pesar de la oposición de su tío, y sintiendose llamado a la vidamonástica, entra en el Monasterio de Mayfouq, y entra como novicio eligiendo el nombre de Charbel, que en sirio significa "historia de Dios".

Transcurrido el primer año de noviciado fue trasladado a Annaya, al Monasterio de Maifuq, en el segundo año de estudios. A principios de Noviembre de 1853 el novicio vistió el hábito monástico y pronunció los votos solemnes ante el superior, padre Antonios Al Bani.

Lo trasladaron al Monasterio de San Cipriano de Kfifane, donde estudó filosofía y teología durante cinco años, bajo la guía de Nimatullah Al- Hardini, conocido como "el santo de Kfifane".

Fue ordenado sacerdote junto a la sede pratiarcal de Bkerké el 23 de Julio de 1859. Charbel volvió al Monasterio de Annaya, donde permaneció quince años; siguiendo su petición se convirtió en ermitaño en la cercana Ermita a 1378 mwtros sobre el nivel del mar, a solo veinte minutos del convento de Annaya, donde se somete a las más duras mortificaciones.

Su práctica de la pobreza fue total, tanto en la ropa y en los alimentos en su celda. Jamás aceptó dinero. Se esforzó con vigilencia a custodiar el voto de castidad y a velar por sus sentidos, lo que hace pensar en esas duras luchas que enfrentó Charbel.

La oración del P. Carbel fue continua. Transcurria gran parte de la noche en oración. Celebraba misa con mucha atención, implorando la misericordia divina para los hombres.

Charbel junto a sus actividades misioneras y contemplativas, reservaba un lugar importante para la actividad manual. En cada estación se dedicaba a las labores domésticas y agrícolas prpias del tiempo.

El ascetismo de Charbel fue discreto, sin espectacularidad, vivía una adoración profunda y una extraordinaria sencillez de corazón, con un abandono filial en Cristo.

Viviendo de Dios y para Dios, Charbel se convirtió en un trámite entre el cielo y la tierra, Sacerdote entre los hombres, jamás permaneció indiferente a sus aflicciones e intercede junto a Dios por los que le eran encomendados o le habían sido remitidos.

Mientras celebraba la misa, con el rito siro-maronita, el 16 de Diciembre, en el momento de la Elevación de la Hostia Consagrada y del Cáliz con el vino y recitando la Plegaria Eucarística, sufrió un derrame cerebral; trasladado a su cuarto, pasó ocho dias de sugrimiento y agonía hasta que dejó este mundo el 24 de Diciembre.

Después de varios meses desde su muerte,ocurrieron fenómenos extraordinarios en su tumba, que fue abierta encontando su cuerpo intacto y sereno, se trasladó a otro ataud y fue depositado en la capilla y, puesto que su cuerpo emanaba un sudor rojizo, sus vestidos fueron cambiados dos veces por semana.

Una comisión de médicos verificó la integridad del cuerpo y la persistencia del sudor mezclado con sengre, encontrado ya medio siglo antes.

En el proceso de canonización se narran la curación milagrosa e instantanea de una úlcera maligna de Sor María Abel Kamari el 12 de Julio de 1950, la recuperación de la vista de un ciego, dierto Iskandar Obeid, ocurrida mientras el fiel estaba orando en la tumba del futuro santo en 1937 y la curación de un cáncer de garganta en fase terminal de Myriam Aouad ocurrida en 1967.

Pablo Vl lo declaró beato en 1965 y proclamó santo el 9 de Octubre de 1977 durante el Sínodo Mundial de los Obispos. La Iglesia dio este paso ante las curaciones inexplicables atribuidas al gran místico.

Este ermitaño libanés ha pasado su vida en la ocultación y tras su muerte se iluminó el valle alrededor de su tumba. Su cuerpo ha permanecido incorrupto 79 años (de 1898 a 1979) y ha continuado emanando un líquido rojizo con propiedades milagrosas. Fue definido como el P.Pío de la Iglesia Oriental de 1800..

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