Universo cristiano

Las respuestas de la fe

En nuestra sociedad, a veces, se vive, y se sufre, tiempos de cambio y de crisis, pues afectan a la totalidad de la vida, a las verdades elementales, a los valores éticos, que afectan a la misma posibilidad de llegar a la seguridad de la fe. Hombres y mujeres se dedican a la búsqueda de respuestas satisfactotias, de la felicidad más genuina y segura, que puedan interpretar para vivir con autenticidad los acontecimientos gozosos y dolorosos de la vida.

Aun conservamos una aguda conciencia de nuestra libertad. ¿Sabemos liberarnos de los prejuicios del conformismo para ser sinceros y honestos con nosotros mismos?. Podemos, si nos tomamos en serio las grandes preguntas que todos llevamos en nuestro interior: ¿quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿a dónde voy?. Si vengo de la nada y me dirijo hacia la nada, ¿qué debo esperar?, ¿qué debo hacer?. La vida, en su totalidad, ¿tiene un sentido comprensible?.

Con el progreso hemos obtenido la posibilidad vertiginosa de tener entre las manos una ingente cantidad de bienes, al mismo tiempo que un enorme poder sobre la naturaleza. Y aun la posibilidad de dar respuesta a nuevos y antiguos problemas como el hambre y al enfermedad; que son señales que parecen indicarnos un futuro de plena libertad para el género humano. Pero, al contrario, el progreso engendra nuevas formas de opresión, nuevos tumores y peligros para la globalización: pretextos para el expolio de los recursos naturales y, por consiguente, su destrucción..

Hay quienes se lamentan de un empobrecimiento en las relaciones humanas, basados en el anonimato, en las rarezas, en las relaciones superficiales, y hasta instrumentales, que contrastan con muestro anhelo más profundo. amar y ser amados.

He aquí un camino para la esperanza. Guiémonos por estos breves textos, preciosos, que pueden resolver muchos interrogantes que permenecen ocultos desde hace mucho tiempo. Es dejarse interrogar para progresar hacia un desarrollo interior que nos obtendrá una fe segura. En efecto, el propósito de la fe no es abandonarse a merced de la noche, o en la búsqueda; pero nos enseña que no debemos tener miedo porque una luz interior es posible.

Todos nos hacemos las mismas preguntas. Todos necesitamos tener valor para ver más allá de nuestro horizonte, a veces, limitado. Precisamos compartir nuestras razones para vivir, creer y pensar. No tengamos miedo, porque es posible responder a todas las objecciones..

La luz del Credo no está reservada a los intelectuales: ésta es le convicción del Cura de Ars. Alguién le informa de que un intelectual le espera en el fondo del templo. El Santo se dispone a saludarlo. El estudioso responde: "Pero, señor cura, yo no tengo fe". El rostro de Don Juan se entristece: "Entonces, mi querido señor, Vd. no sabe más qu mi empleado".

Es una gran suerte poder volver a las fuentes del corazón.

Îndice de argumentos

Oraciones

› Grupo de oración

Del Monasterio Invisible de Caridad y Hermandad ora por todos los hermanos que tienen cualquier tipo de necesidad. Si tienes alguna necesidad o eres una persona generosa que quiere interceder por los demás, puedes unirte a nosotros.

Nazareth

› Virgen María Madre de Dios

Usted no debe resistirse al llamado de la Madre. Es el más sincero, es el más sagrado, es el más eficaz de todos. Se le llama así porque: la voz parece debilita por la fatiga, parece tal vez llorosos.

Evangelio

› Parábolas eségesi

Jesús usó las parábolas con fines pedagógicos y para revelar el Reino de Dios y se dirigió a la multitud, pero muchos con un corazón duro no lo entendieron, no pudieron entenderlo, lo rechazaron, como también hoy.

› San José el Patriarca

La grandeza de este santo es incomparable e inimaginable. En San José Dios le dio para extender su poder sobre todo.

›La devoción al Sagrado Corazón de Jesús

Práctica devocional de los nueve Primeros Viernes de mes que se originó en Santa Margarita María Alacoque tras una gran promesa hecha por revelación de Jesús mismo.

› Las Últimas Cosas

Las cuatro últimas cosas son los últimos y decisivos acontecimientos que se enfrenta el hombre al final de la vida y son: muerte, juicio, cielo o al infierno sin olvidar el purgatorio.

› El Infierno, una terrible realidad.

La esperanza es no hundirse en ese horror que nunca terminará.

› Purgatorio lugar de purificación

Sólo el sufrimiento purifica como el fuego y quema toda la escoria. Hay muchos hermanos que están tratando de llegar a recibir un acto de amor que los lleva donde el sol brilla lo eterno.

› Paraíso

Lo que ojo no vio, ni oído oyó, ni ha sentido el corazón del hombre lo que Dios ha preparado para los que le aman.

› La Pasión y Crucifixión de Jesucristo

El extraordinario poder que la meditación sobre el alma de las distintas etapas de la Pasión del Señor se manifiesta en la paz que viene, que despierta los afectos fuertes, en el sentido de la fuerza que invade y una nueva esperanza que infunde.

› Ana Catalina Emmerick

Esta mística sufrió y murió por Cristo, relata las etapas dolorosas de la Cruz.

› María Valtorta

En la riqueza de las visiones en las que le muestran un evangelio que no sustituye el Evangelio, sino que lo expande e ilumina.

› Fe

La fe y la razón son como las dos alas con las cuales el espíritu humano se eleva hacia la contemplación de la verdad.

› Hope

Cuando las cosas van bien, ¿cuál es la esperanza? El éxito, la plena salud y el dinero que intoxica la mente, logros que dan la sensación de omnipotencia, pero...

› Caridad

Debemos estar dispuestos a aceptar la invitación de Dios para liberar el corazón de la esclavitud de las pasiones para que sea llenado con su amor que nos impulsa hacia la caridad.

› Universo católico

Universo católico se propone ofrecer una plataforma culural y moral fundada en los auténticos valores cristianos. Conocerás la Verdad y la Verdad os hará libres, ha escrito el apóstol San Juan. Y la verdad es un bien precioso.

› Ángeles

Seres de Luz que arden con el amor divino, son nuestros maravillosos aliados.

› Apariciones marianas

María con su actuación como mediadora, reveladora y anunciadora, durante siglos en la historia de la humanidad.

› La Misericordia de Dios

Dios ha revelado su amor misericordioso que eleva al hombre del pecado y repara todas las debilidades y defectos humanos.

› Verdadero amor

El verdadero amor es tan grande que vale la pena buscarlo. Si lo encuentras no tendrás dudas. Te traerá la alegría y la felicidad.

› Santuario de Nuestra Señora de Oropa

En Oropa Santuario donde se venera la Virgen Negra, hubo milagros, curaciones, conversiones y prodigios en gran número. Aquí se encuentra con el Corazón de María.

› El Diablo

Un gran seductor, con su lengua viperina, es el padre de la mentira y nos atrae al camino de la mentira.

› El pecado y la moralidad

Tengo que poner todo en su lugar. Creemos que hay un cierto desorden que nos molesta, pero a menudo no sabemos qué.

› Las Tentaciones

Las tentaciones aunque graves y molestas, son útiles para el hombre, porque en ellas se humillan, se entrenan y se enmiendan.

› La penitencia y el ayuno

Hoy en día, hablar de la penitencia parece un argumento paradójico porque el hombre, dominado por el pecado, ha perdido el sentido de Dios.

› Milagros Eucarísticos

Los milagros eucarísticos confirman las palabras de Jesús, fortalecen la fe y muestran la presencia real del Cuerpo y la Sangre de Cristo en el pan eucarístico.

› Milagros

El milagro es un signo de la presencia de Dios y de su trabajo y está íntimamente ligado a la fe. Por lo tanto, la fe precede al milagro de hecho, es la premisa para que se haga realidad.

› Viaje Interior

Angela estaba luchando como muchos contra una obsesión mental y depresión, hasta que decidió emprender un viaje hacia el interior desde donde se produjo una sorprendente curación.

› Bienaventuranzas evangélicas

El discurso de la montaña es una exhortación que Jesús dirige a sus discípulos y a una gran multitud reunida en una montaña situada al norte del Mar de Galilea, cerca de Capernaum, para escuchar su Palabra.

› Encienda la esperanza

No serías feliz al ser amado por una criatura que te de por completo su corazón? La vida es tan maravillosa que es una pena desperdiciarla.

› La Amistad

La verdadera amistad es el sentimiento de afecto que une a las personas en una y el ego se convierte en un nosotros. La amistad puede participar y compartir todo con los demás...

› El Decálogo

Dios ayuda al hombre y lo guía en tiempo oportuno por las empinadas calles del mundo, nos donó los Diez Mandamientos los cuales son reglas dictadas por su ardiente amor.

› Ser cristiano

Es importante saber si el alma es inmortal, si hay otra vida después de la muerte, si hay un Dios que nos da la bienvenida y nos juzga, si hay una gran felicidad...

› Las heridas del alma

Cada criatura se sentiría en el corazón y una alegría desbordante felicidad incontenible donde la mente se une a la inmensidad en un canto alegre que brote del corazón.

› Meditaciones

Reflexiones y meditaciones sobre lo trascendental para iluminar el alma y descubrir un pedacito de cielo..

› Lectio Divina

La Fuente de vida del Verbo se acelera en el corazón y lleva a la verdad real. La lectio divina es un viaje a través de la fe y la conversión.

› El poder de la oración

Las antiguas tradiciones revelan que la lengua que nos une a Dios está representada por los sentimientos y las emociones. Orar con todo tu corazón, significa sentir los sentimientos que ya han tenido lugar en nuestro sueño.

› Enfermedad salud y bienestar

La enfermedad no afecta sólo al aspecto biológico cuya competencia es de los médicos, sino que está ligada a la vivencia existencial del hombre.

› Silencio y Meditación

Vivimos en un estruendo emocional en el que es difícil salir airoso, y luego es necesario encontrar el tiempo para mirarse dentro e interrumpir la espiral de tanta actividad, decir o ser.

› Santa Rita de Cascia

Santa Rita es uno de los santos más queridos de hoy, el tema de una extraordinaria devoción popular, porque es amada por el pueblo que la sienten muy cerca.

› San Benito

Le permite conocer el poder de la cruz de San Benito contra las epidemias, enfermedades, malvado demonio. No es un símbolo mágico que anula todas las dificultades de nuestra vida, sino un medio que puede ayudar a superarlos.

› San Francisco

El pobre de Asís, el cantante de la alegría perfecta. El personaje más famoso de todos los santos y amado en todo el mundo.

› San Juan Bosco

Un gran apóstol de la juventud. Su vida fue un verdadero, justo y gran martirio una vida de trabajo colosal que daba la impresión de estar oprimido con solo verlo.

› San Antonio de Padua

Su doctrina extraordinaria fue acompañada por los prodigios de todo. San Francisco le llamó confidencial: mi Obispo.

› Santa Teresita del Niño Jesús

Santa Teresa de Lisieux trastorna la Iglesia y el mundo con un huracán de gloria.

› Santa Lucía Virgen

Con su martirio dio a la historia su grito de amor a Jesús.

› Santa Catalina Labouré

Era una monja humilde, mística, simple y angelical. Mensajera de la Medalla Milagrosa. No encontró ninguna dificultad para vivir una vida de sacrificio en la oración y la mortificación.

› Santa Catalina de Siena

Catalina fue proclamada Doctora de la Iglesia siendo una mujer que no sabía leer ni escribir. Es la paradoja de la sabiduría de lo simple que se adentra directamente en el misterio de Dios.

› Santa Rosa de Lima

Rosa amaba a Cristo incluso en los pobres y los enfermos, por eso los acogió.

› San Martín de Porres

Sus carismas son tan grandes que algunos estudiosos lo han definido como el Padre Pío de América Latina. Es muy popular en América del Sur, especialmente en su Perú natal

› Santa Isabel de Hungría

Princesa santa que ayuda a los leprosos y enfermos sin curación en la penitencia extrema e intensa caridad.

› Fraile Antonio Galvão

Alimentó la espiritualidad franciscana y abrazó el alma ardiente de amor en la vida religiosa.

› Santa Gemma Galgani

Esta Santa con los estigmas fascina por sus experiencias espirituales y místicas. Diálogos con los ángeles, y éxtasis...

› San Charbel Makhlouf

Este santo nos urge al descubrimiento del misterio divino, en un incesante estupor del amor de Dios.

› Juan María Vianney

Era un santo humilde, admirable por su celo pastoral y por su deseo ininterrumpido para la oración y la penitencia y modelo de la piedad.