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El Rayo de Dios

¿Quieres ser verdaderamente feliz en tu vida? ¿Quieres el bienestar integral? Este libro puede ser llamado un camino a la verdadera felicidad, realmente es una propuesta muy seria que merece la mayor atención a aquellos que realmente quieren su propiedad personal y el de toda la comunidad.

El problema básico que enfrenta es candente y siempre está presente en el sentido de la vida.

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Comentario de José

Yo diría que este nuevo libro es como una ruta a la auténtica felicidad. El análisis de las situaciones personales, casos especiales, la cultura contemporánea se realiza con precisión y exactitud, sin descuidar nada, va todo en camino a la lógica subyacente de la vida cotidiana.

Las soluciones propuestas se inclinan no sólo al discurso psicológico o psicoterapéutico, más aún se ve como la solución al problema existencial, debe buscarse en las razones más profundas del espíritu humano hecho a imagen y semejanza de Dios.

En este sitio, hay reflexiones tan exhaustivas y profundas que por sí solas valen la pena considerar este libro como un verdadero regalo para hacer frente a la luz de su propia mente.

Comentario de Rosa

Leí los libros publicados por los hermanos Guelpa, el último "A Dios" me dio muchas respuestas y la oportunidad de poner en tela de juicio todo argumento que en el se trata. Una noche, mientras estaba leyendo, pensé que sería interesante discutir los temas que están en el libro con otras personas, sólo estaba empezando a leer. Fantasía? Imaginación? Yo estaba sin duda influenciada por el título.

Mientras leía lentamente, poco a poco se formó ante mis ojos una escena que se ha quedado conmigo a lo largo de la lectura del libro. Vi con claridad y con incredulidad, un círculo de piedra, y en el círculo un fuego que desprendía calor. Alrededor del fuego jóvenes y viejos, hombres y mujeres, en profundo debate, hablaban, hacían preguntas, muchas preguntas sin respuesta. Por un lado un arroyo con agua clara. En lo alto del cielo, en una nube blanca, Nuestro Señor, que estaba con la barbilla apoyada en la palma de su mano derecha. Este grupo de niños lo observaba, escuchaba a menudo cambiando de expresión, unas veces complacido, otras enojado, pero siempre con los ojos llenos de amor y mucha ternura. Vi la expresión de un rostro que sentía solo en mi mente y no era visible a los ojos. De hecho, yo no lo podía describir.

La pregunta que todos nos hacemos, casi con obsesión es: "¿Cuál es el sentido de mi vida, porque este vacío dentro de mí?" y otros cuestionamientos de este tipo, mirando a las grandes empresas, por que nuestros sueños son imposibles, imaginamos proyectos que nunca se hacen realidad. Aunque no todas sino muchas de las respuestas esenciales están en el libro. Estos son los argumentos y las respuestas a nuestras preguntas. El cristiano dirá "cuesta" a lo largo del camino que lleva a Jesús, el ateo recorrerá el camino sin darse cuenta de que está siguiendo a Jesús y luego se encontrará cambiado y quizás también convertido. Al leer el libro no encuentra milagros, pero sucede que a veces un libro cambia totalmente nuestra mentalidad. Pronto nos damos cuenta de que la vida sólo tiene sentido si miras a tu alrededor y prestas atención a las pequeñas cosas de la vida cotidiana, las pequeñas cosas te dan felicidad.

No tienes que pensar en cosas grandes. Durante la vida, nos enriquecemos, con la experiencia que cada día trae nuevas cosas, nos enteramos de que el sufrimiento nos fortalece, nos deleitamos en la suavidad, un libro enriquece nuestra mente, abre nuestra mente. Aprendemos de otras verdades, profundizamos en lo que ya sabíamos. Y todo esto es "nada"? "Dentro de Dios" es un libro para todo el mundo, es una lectura requerida, para recomendar. Recuerdo haber visto en alguna parte: que un pintor representa a Jesús llamando a una pesada puerta. Durante la exposición que hace el pintor, el visitante se acerca al pintor y le dice que él hizo una puerta sin manija. El pintor responde, esa puerta es el corazón humano, el cual sólo se abre desde el interior. La lectura de este libro no abre la puerta de nuestro corazón a Jesús, sino que nos ayuda, nos invita a hacerlo. Y está escrito en mi opinión para que los lectores compartan con nosotros esta maravillosa oportunidad. Al abrir la pesada puerta aprenderá a amar.
Me encanta el verdadero sentido de la vida.