La Familla de Nazareth
Después de haber residido en Egipto, José y Maria con el Niño Jesús van a Nazareth.
Ahora nosotros nos preguntamos: "Fuera de los evangelios, ¿hay otros testimonios de la Vida del niño Jesús, adolescente y joven en Nazareth?".
Pues bien, hay algo. Algunos indicios nos ayudan a reconocer las huellas de esta presencia.
Por las excavaciones ejecutadas en temporadas sucesivas, se ha descubierto que la población de Nazareth vivía de agricultura principalmente. Esto es reforzado por unas fuentes escritas como, por ejemplo, el evangelio de Tomás, en el cual jeemos que Jesús ayudaba José en la siembra. Esta zona de Galilea es fértil y favorece, sin duda, este tipo de actividad. En el tiempo de Jesús era más fértil la vegetación y cultivos, y los mismos parientes del Maestro y sus descendientes fueron campesinos.
El último pariente del Señor conocido por nombre, el mártir Conone, muerto en el 240 durante la persecución de Decio, era también un agricultor y es mencionado en una gruta muy importante en la basílica del Anunciación.
Otro testimonio escrito, no evangélico, hacía la presencia de Jesús en Nazareth, concierne, en cambio, la que era la sinagoga de Nazareth. Aquí, en el VI siglo: "se mostraba, a los peregrinos, una viga sobre la cual se sentaba Jesús cuando era pequeño, es decir cuando frecuentaba la escuela de la sinagoga"(ibid).
Pero el testimonio más significativo de la presencia de Jesús en Nazareth es representado por los numerosos grafitos, de los peregrinos, localizados en la gruta de Conone, sitio de culto de los primeros siglos del era cristiana. Aquí los visitadores de Tierra Santa incidieron unos nombres con las invocaciones para Cristo. "Estos grafitos ofrecen mucho interés, ya porque prueban, desde los tiempos antiguos, la afluencia de los devotos a la pequeña gruta, porque ellos muestran la expresión de fe de una época muy antigua"(Elle Di Ci Leumann, Sui passi di Dio, Guida, pag. 57).
Estos grafitos fueron leídos en esta manera por el fraile Franciscano padre Bagatti, el más insigne arqueólogo de Tierra Santa: "O Jesús Cristo, hijo de Dios, ayuda Gene y Elpiseo (sostienes) los siervos de Jesús…..". Como se puede ver, estas palabras son una invocación para Cristo, Hijo de Dios, ya conocida en otros grafitos judíos, y de época más tardía.
La invocación a Jesús es muy importante porque pertenece a un ambiente judío-cristiano, formado por el primer grupo de personas que en Nazareth perpetuaban el culto a Jesús, no era distinto respecto al nuestro culto. En efecto, muchos cristianos de raíz judía admitían solo Jesús como Cristo, y no como Dios (Cfr. Elle Di Ci Leumann, Sui passi di Dio, Guida, pag. 57). En cambio hemos aquí una evidente alusión a su divinidad).
Pues en Nazareth, Jesús vive su ordinaria experiencia de niño, de Joven y de hombre.
Y aquí, en el silencio de una pequeña ciudad de la Galilea, una ciudad apenas conocida en las fronteras de la Palestina, se prepara un hecho destinado para cambiar el mismo curso de la historia, imprimiendo, por la primera vez, a ella, una profunda dirección de esperanza y de paz.
" Jesús, por su parte, crecía en sabiduría, en estatura y en gracia delante de Dios y de los hombres" (Lucas 2,52)
PARA EL DESCUBRIMIENTO DE JESÚS DE NAZARETH
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