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| El Profesor Fustinoni ha cumplido más de sesenta años de ejercicio profesional, a través de las cuales ha ejercido, entre otros cargos, los siguientes: Presidente de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, Profesor Emérito y Decano de la Facultad de Medicina (UBA); Presidente de la Academia Nacional de Medicina; Presidente de la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría; Presidente del Instituto Cultural Argentino-Israelí y Médico Consultor del Hospital Naval. Sus textos son obligados libros de consulta en el país y en el extranjero. Es requerido permanentemente para dar conferencias. Hoy es un destacado gerontólogo de fama internacional, y es reconocido como “Maestro de la Gerontología Argentina”.De él se dijo: “Justamente en este momento de sociedades en crisis, cuando los paradigmas son escasos y los jóvenes no tienen a quien copiar, es cuando la figura de Fustinoni se agiganta”. Su crecimiento estuvo signado por situaciones personales bastante difíciles y para nada cómodas. De su hogar aprendió la virtud de la constancia en el trabajo y a no vencerse frente a las dificultades. Sus estudios universitarios lo llevaron a conocer y a tomar como referentes a profesores del nivel de los doctores Castex, Merlo, Arce y Garrahan entre otros. Esta situación privilegiada lo comprometió aún más con la tarea que desarrollaría en su futuro profesional.Las miradas de estos profesionales guiaron sus pasos en la Facultad de Medicina. Ésta es una situación que recuerda con énfasis en la siguiente anécdota: “Un día el Profesor Tiburcio Padilla, recién nombrado titular de la cátedra de Semiología y Propedeútica, se detuvo a conversar conmigo y me preguntó qué pensaba hacer cuando me recibiera. Le respondí que no lo sabía aún, pero que posiblemente me quedara con el doctor Ahumada, con el que realizaba las prácticas de ginecología. Entonces me dijo perentoriamente: “No, usted se viene conmigo”.Las circunstancias lo condujeron a ocupar lugares de decisión que ha cumplido con la misma firmeza y dedicación que su estudio y vida profesional. Finalmente, cuando hablamos de criterio y seriedad del doctor Osvaldo Fustinoni no solo nos referimos a su aspecto académico y científico sino a su visión humanista de la relación médico-paciente. Cerramos esta semblanza retomando nuevamente las palabras del profesor Doctor Federico Pérgola, quien al trazar la importancia del Tratado de Semiología escrito por Fustinoni comentara : “Son muy pocos, reitero (y mi memoria se detiene en la anatomía de Testut-Latarjet), los libros que mantienen su vigencia durante seis décadas. El Profesor Osvaldo Fustinoni y sus hijos han demostrado que ello se puede lograr con tesonera inspiración, trabajo y rigor científico”. | |
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Un personaggio di tale fama è un vanto per noi Fustinoni e non richiede alcun commento, ma semplicemente il nostro plauso. |
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