Extracto de un escrito de Pier Luigi Gardella Traduzione: Franca Millaci
El 10 de marzo de 1946 se considera la fecha de fondación del Priorato Diocesano. En efecto aquel d¡a, en el ORATORIO DELLE ANIME en Via S.Vincenzo en Génova, se reunieron unos treinta representantes pertencientes a las Cofradías de la diócesis genovés. Es probable que ya en 1939 se intentó por primera vez la costitución del priorato Diocesano pero los acontecimientos bélicos contrastaron el proyecto. Este último se concretó el 18 de febrero de 1946 cuando tuvo lugar el encuentro entre Giuseppe Casareto y el Vicario Capitolare Mons. Francesco Canessa.
La orden del día de la reunión suponía:
Un estatuto común para todas las Cofradías de la diócesis;
Publicación de unos artejos referentes a las actividades de las Cofradías;
Reconstrucción de los oratorios dañados por la guerra.
Relativamente a la reunión, hay que evidenciar lo que al poco tiempo escribió Carlo Pinasco - Superior de la Cofradía N.S. del Rosario del barrio genovés de San Fruttuoso. El día 10 de marzo él dijo que a pesar de los daños producidos por la guerra, la Cofradía mantiene su vitalidad.
Unos días después, el 13 de marzo, en el Oratorio delle Anime, tuvo lugar la primera reunión del Consejo en la que se nombraron varios Delegati di Zona responsables de las Cofradías a ellos asignadas.
Finalmente el 30 de Marzo de 1947 durante la asamblea plenaria de las Cofradías se presentó el estatuto que fue aprobado por unanimidad.
Como antedicho, entre los problemas más importantes arrostrados por la Consulta Diocesana de las Cofradías, no tenemos que olvidar el de la reconstrucción de los oratorios dañados por la guerra.
En este período cada Cofradía tenía cerca de 200 asociados. Por desgracia el 2 de septiembre de 1947, murió Giacomo Canevello - el que junto con Giuseppe Casareto se considera el más importante promovedor de la restauración de las Cofradías genoveses y fundación de la consulta Diocesana.
En 1950 el Priorato, en consideración del año santo, favoreció varias actividades para sensibilizar fieles y hermanos. En particular, en una letra del 2 de febrero de 1950 enderezada a todas las Cofradías de las Diócesis, se evidenciaron unos puntos fundamentales:
Convocación de las reuniones de zona;
Común, cumplimiento del precepto pascual;
Rezar cotidianamente el rosario;
Difundir el periodismo católico.
Desde 1957 las Cofradías empezaron las grandes peregrinaciones a santuarios y ciudades.
La más importante peregrinación fue la que tuvó lugar en 1967 en Roma ante el Sumo Pontífice Giovanni XXIII.
Con el tiempo, las reuniones de las Cofradías se fijaron el día 25 de abril.
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